Un deseo hasta el infinito. Que la felicidad de hoy esté siempre contigo.
Siempre con el corazón amando, abierto a todos tus sueños y siendo protagonista de ellos. Con gran ilusión de recibir a Jesús entre tus brazos.
Poco a poco llegarán todas esas cosas que le pides a Jesús desde el corazón.